miércoles, 5 de marzo de 2014

Colmadón y Presidente

Esas ganas de sentarte en un café, de tomar un trago y disfrutar.
Disfrutar la trama
Las escenas
Los personajes
Aquello a que no le prestas atención
A todas esas cosas que son difíciles de apreciar en medio de la ciudad
Entonces te quedas, pues, con las bocinas de los vehículos, con el imprudente que grita sin parar, como que los demás no existen, con aquella persona que te observa y te analiza, y tú sin saber el por qué, con el ‘’no me importa’’ de todo el que te rodea, con el vivir por vivir, con la rutina, con los que nunca han tocado un libro, con los que leen por obligación, con los que la TV les ha intoxicado el ‘‘cerebro’’, con esos, que para ellos eres un ‘‘estúpido’’, por no haberte tirado los últimos awards que dieron en el mes… con esos.

Pero no hay café
Ni personajes, pues veo copias, clones
Y se repiten
Y se repiten
Y se repiten

Y los repito
Los repito
Los repito

Para que mentir, o mentirme, si no queda más que colmadón y Presidente!
Colmadón y Presidente!
Colmadón y Presidente!
Colmadón y Presidente!

Hasta la última clase, con el clon titular, que si licenciado, que si master en pura mierda
Y eso le pasan a los clones más jóvenes
Pura mierda

Hasta el próximo amanecer
Las 8 horas de oficina
Los clones
La pura mierda
Colmadón y Presidente!
Colmadón y Presidente!

¿Qué decir?

Pues qué más da, ese ‘‘hasta’’, para los no-clones, no será más que un ‘‘por ahora’’


Así me quedo, por ahora.

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